Seamos realistas, probablemente todos hemos sido víctimas de un vampiro psíquico, posiblemente sin siquiera saberlo. Puede haber sido un encuentro casual con un depredador de energía que nos dejó temporalmente agotados, o posiblemente una interacción vampírica a largo plazo con graves efectos de desgaste en la mente y el cuerpo. El vampirismo psíquico está vivo y floreciendo en el mundo de hoy. Como consumidores de energía en lugar de sangre, los vampiros de tipo psíquico existen en muchas formas pero con un rasgo común: su propio sistema de energía inadecuado los obliga a aprovechar y alimentarse de las energías de las víctimas que cogen desprevenidas.

Los vampiros psíquicos, al igual que sus homólogos del folclore, pueden ser hombres o mujeres, jóvenes o ancianos. Pueden ser preadolescentes, adolescentes o adultos. Pueden ser gente de negocios, ejecutivos, celebridades o simples trabajadores. Pero también puede ser un vecino o incluso un miembro de la familia.

¿Quiénes son los vampiros psíquicos?

Se llama vampiros psíquicos a aquellas personas que tienen la capacidad de drenar consciente o inconscientemente la energía vital (prana, chi, etc…). El vampirismo psíquico parece ser un fenómeno relativamente reciente, puesto que las leyendas sobre vampiros como bebedores de sangre son las más conocidas.

El término “vampiro psíquico” fue popularizado a mediados de 1800 cuando los miembros de la Sociedad Teosófica dirigieron su atención a la investigación de la psique humana, que se describe como la mente, el alma, las emociones y todos los demás procesos mentales que tienen lugar dentro de un individuo y que no son visibles o medibles en el mundo físico. Los miembros de la Sociedad Teosófica indican que hay dos tipos de vampiros psíquicos:

Vampiro astral: Estos absorben tu energía en el momento del sueño, cuando tu cuerpo astral esta fuera del físico y solo unido “al cordón de plata”. El resultado es un despertar agotado físicamente, mareado e incluso desubicado en el espacio (sin saber muy bien donde estas), dolores de cabeza, etc. Estos síntomas evidentemente deben ser repetitivos en el tiempo para poder relacionar y confirmar un ataque psíquico.

Vampiro magnético: Descrito por el célebre escritor teosófico Franz Hartmann, son como “esponjas psíquicas” de la vida, que absorben la energía de quienes le rodean. Allí donde estén siempre habrá malestar físico y emocional.

Vampiros psíquicos conscientes

Son aquellos que deliberadamente toman la energía de los demás, ya sea por medios mágicos (o por ejemplo de los “servidores”) o por alguna habilidad instintiva, a través del plano astral, o descargando la energía de los demás de una forma directa, a menudo a través del aura de la víctima. Sin embargo, algunos no pueden ser capaces de controlar por completo sus “drenajes” lo intentan pero no pueden llegar a controlar completamente, así que buscan métodos para aprender y conseguir más eficacia en sus “drenajes”. Suelen tener una personalidad fuerte y volátil.

Vampiros psíquicos inconscientes

Sencillamente no entienden lo que son y tienden a “vagar por la vida” en un estado que transita entre la felicidad y la ignorancia o negación. Estos tipos de vampiros suelen tener relaciones muy difíciles y duras. Y hasta que por fin llegan a comprender lo que son pasa bastante tiempo. A menudo se relaciona a las “las personas tóxicas” con los vampiros psíquicos por su similitud en sus comportamientos. Casi siempre se escucha la típica frase de: “que persona tan incomoda no la conozco pero me cae fatal, solo verla ya me cae mal no sé qué me pasa, no puedo estar a su lado”.

Como reconocer a un vampiro psíquico

Este tipo de vampirismo es difícil de reconocer, exceptuando por algunas pautas de comportamiento. Algunos sostienen que la única forma de reconocerlos es a través de la lectura del aura. Este mismo problema nos lo encontramos con los vampiros emocionales, que por lo general ejercen un fuerte control mental a la víctima y hacen todo lo posible para provocar sentimientos de angustia, vergüenza y dolor, generalmente les encanta humillar a aquellos que más amor le profesan.

En resumen, este tipo de vampiros tienen un mismo patrón de conducta y siempre nos encontramos con una misma respuesta: la causa de su infelicidad es que todo el mundo está contra ellos y que nadie les comprende. Son sádicos en todos sus aspectos, cuando hablan, en su humor, en su forma de expresión hacia los demás.

Protección contra los vampiros psíquicos

Cristales de cuarzo son los mejores protectores de nuestra energía vital y cuando se usan adecuadamente son los mejores objetos para la protección de cualquier ataque vampiro. Una vez que el cristal está debidamente programado y después de que este se mantenga próximo al cuerpo físico, el cristal creara un escudo protector para proporcionar una constante protección al portador. Este procedimiento es especialmente eficaz sobre todo cuando un vampiro psíquico puede estar viviendo o trabajando contigo.

Los que andan en el lado oscuro de la vida

Si bien no pueden chuparnos la sangre, si drenan nuestras energías dejándonos deprimidos e irritables y una larga lista de situaciones emocionales y psíquicas. Pero por otra parte no todo el mundo es vulnerable a un ataque psíquico. Si tu “inmunidad espiritual” es alta tú estarás protegido contra todo tipo de ataques psíquicos. Si tu identificas un lugar o una persona que agota tu energía (ya sea intencionadamente o no) la forma más sencilla de tratar con este tipo de personas a corto plazo es mantenerse alejado de la persona, lugar u objeto.

También puedes visualizar una esfera brillante de oro alrededor de tu cuerpo así desviarás toda la energía negativa. Otra forma muy simple de protección es la sal. Los cristales de sal son poderosos protectores de la energía y una de las mejores formas de protegerse es usar un puñado de sal marina en el baño. Cristales de turmalina, como la obsidiana se pueden colocar en un lugar continuado porque absorben la energía negativa.

La sociedad asocia la palabra vampiro con las criaturas chupadoras de sangre. Sin embargo el concepto de un “vampiro psíquico” es muy diferente porque estos te drenan la energía, y además estos ataques pueden venir de cualquier lugar. Debemos ser conscientes de que estas personas existen y que podemos ser víctimas de ellas en cualquier momento.