La regla de oro para la creación de tu propia realidad en cuanto al amor, es precisamente soltar toda deducción lógica y capacidad deductiva. ¡La creación del amor comienza dentro de ti, pero no en tu mente sino en tu corazón, en tus sentimientos, y en tu alma! Deja fluir tu energía del amor al cosmos… no ates esa energía a un sentimiento concreto.