
De la misma forma que existen patógenos como las bacterias, virus, parásitos, etc…, en esta tercera dimensión, hay patógenos no físicos en otros planos dimensionales en forma de parásitos etéricos. Estos parásitos y las garrapatas astrales pueden adherirse a nuestro cuerpo astral y alimentarse de nuestra energía, creándose en algunas ocasiones verdaderas infestaciones físicas reales. Los síntomas de estos parásitos en nuestra aura son los siguientes: extrema fatiga o un fuerte cansancio constante, sensación de «drenaje» energético, trastorno en el sistema respiratorio, digestivo, urinario y sistemas endocrinos.
El origen de estos parásitos astrales se encuentra en las formas de pensamiento negativas. Tanto los pensamientos negativos como los positivos se distribuyen en diferentes planos etéricos y no desaparecen nunca. Hay que recordar que la energía ni se crea ni se destruye únicamente se transforma, y posteriormente se ubica en algún lugar de los distintos planos dimensionales existentes. Una vez los pensamientos negativos se ubican en estos planos se transforman en seres cuya ubicación es el plano astral. Planos etericos cuya subestructura no es física, pero que coexiste con nuestra realidad material.
Estas energías negativas son alimentadas constantemente por todos los miles de millones de pensamientos que se crean en la mente humana, impregnados de emociones e intenciones negativas. Tal cantidad de energía termina creando unas formas parecidas a remolinos pero impregnadas de inteligencia y propósitos. Su propósito es seguir su propia supervivencia y esta pasa por alimentarse de los mismos tipos de energía que le dio origen. Por lo que si se ha generado a través del odio, esta energía inducirá pensamientos de odio en su huésped (cuerpo astral) con el objetivo de absorber más energía emocional de ese tipo.
Todas las formas de pensamiento, tanto positivas como negativas, flotan en el ambiente ( en la atmósfera psíquica ) así que estas energías negativas generadas por una sola persona por ejemplo, pueden inducir negatividad en otra o incluso a grupos de enteros de personas ( cientos o miles de personas ). Los ocultistas, brujos o hechiceros saben cómo crear estos pensamientos intencionalmente, con el fin de influir conscientemente en la mente de otra persona. Pero la mayoría de las formas de pensamiento se crean involuntariamente de forma espontánea o en momentos puntuales por los propios impulsos y fuertes emociones, así como momentos de malas intenciones que se emiten diariamente.
Muchas personas no son conscientes de la presencia de ciertas energías y de los seres que pueden interferir activamente con su propia energía. Estas entidades astrales se pueden encontrar en innumerables ambientes o lugares que se alimentan de nuestra luz a través de nuestra aura. Estos encuentran su sustento en nuestros miedos, desesperación, ira, resentimiento, amargura, etc… Estas entidades pueden llegar a “parasitar” prácticamente todo nuestro campo áurico. De ahí el nombre de parásitos astrales.
Realmente son un gran problema y se cree que al menos ocho de cada diez personas tiene un parásito astral en su aura. Las personas sensitivas, (psíquicos en general), los niños pequeños, los animales, incluso personas con un poco de intuición pueden detectar la presencia de estos parásitos. Las personas con cualidades psíquicas extrasensoriales pueden ver estas energías, sus colores y formas. Las formas son realmente grotescas y los colores de este tipo de energías negativas son colores que van desde el negro, marrón oscuro, grises y otros colores apagados. Cuando estas energías se convierten en parásitos astrales toman formas como las amebas, insectos, cangrejos, arañas, puntos negros, gusanos, etc… En el mundo astral hay “vida” animal de todas las formas y tamaños, al igual que nuestro propio reino animal físico. A menudo los fotógrafos se han encontrado en sus capturas de imagen con gárgolas y pájaros de formas extrañas, arañas misteriosas, etc… Aunque la imagen más comúnmente encontrada se corresponde a las gárgolas.
Existen también, criaturas infrahumanas de formas cambiantes, pero estos temen a los humanos y de momento, no son de ninguna amenaza para nosotros. Hay otros parásitos astrales que son tan pequeños como inofensivos. Estas pequeñas criaturas en concreto son del tamaño de los mosquitos y la parte de nuestro cuerpo que más les atrae son nuestros dedos, esto se debe a que la luz se concentra en nuestras manos.
Sin embargo, hay parásitos astrales que poseen una inteligencia comparable a veces a la humana que se llaman «malos espíritus» o «demonios». Mucho se ha escrito acerca de esta clase de parásitos astrales (demonios) a lo largo de los siglos, pero desgraciadamente hay mucha desinformación sobre este tema.
En los antiguos textos mágicos se les describen como seres del inframundo que “juegan” con brujos y brujas que no tienen aún conocimientos suficientes o bien trabajan en el lado oscuro para satisfacer sus propias necesidades. Estos seres pedirían algún tipo de intercambio a cambio de conocimientos o poder.
Los parásitos pueden causar enfermedades a nuestro cuerpo y mente. Por eso, hay que ser muy cautos, porque si se les proporciona un entorno hospitalario no se irán. Porque estos seres necesitan un “ambiente”, es decir, una actitud por nuestra parte negativa y ante estas actitudes ellos son atraídos hacia nuestra aura, cuando nuestras frecuencias vibratorias resuenan en una onda parecida a la suya. De esta forma no solo los atraemos, también potenciarán algunos de los síntomas que ya teníamos inicialmente drenando nuestra energía. Los síntomas de estos parásitos “enganchados” en nuestra aura pueden manifestarse de la siguiente forma:
Falta de energía (extrema fatiga) cansancio, trastornos en el sistema respiratorio, digestivo y sistema endocrino, así como depresión, ansiedad, sentimientos de soledad y todo tipo de emociones negativas.
Higiene espiritual
Una buena forma de combatir estos bajos astrales es tomando a menudos baños de sal, y colocando alrededor de la casa o piso rocas de sal del Himalaya, quemando salvia (en carboncillos), quemando otros tipos de incienso especialmente en grano, o llamando a nuestros ángeles, guías de luz, y recitando oraciones o mantras con fe. Hay que tener en cuenta que no siempre querrán irse, por eso si después de una limpieza te levantas una mañana con un rasguño que no le encuentras explicación, posiblemente aquellos astrales que quisisteis desterrar han reaccionado indicándote que no tienen ninguna intención de irse.
Sin embargo, hay que aclarar que este comportamiento no es el habitual, y habría que analizar muchas cuestiones independientes a la limpieza que se realizó. Estas entidades suelen permanecer inactivas esperando alguna pobre alma para parasitarlos.
Pero si nuestro estado de ánimo es estable y procuramos vigilar nuestros pensamientos, no tendrán ningún poder sobre nosotros. Nunca hay que mostrar miedo, porque el único poder sobre nosotros que tienen es el que nosotros mismos les proporcionemos a través de nuestros pensamientos y sentimientos negativos. No tienen ningún poder sobre nosotros, simplemente hay que ignorarlos. Porque el miedo les anima. Ser consciente de una cuestión no requiere por tu parte ni obsesionarte ni tener miedo, porque la información es luz. Por lo tanto, piensa siempre en positivo, y no tendrán absolutamente ningún poder sobre ti.
En dos oportunidades he visto este tipo de parásitos, era como una nube de zancudos oscuras. Al sentir su presencia deserte y con voz firme le hice saber que nada que sea contrario a la luz puede estar en mi casa. Enseguida se esfumaron. La segunda vez era en menor cantidad pero de igual manera les ordene retirarse de mi espacio. Ahora antes de dormir pido la asistencia a el A.A Miguel para que cree un campo de luz sobre mi persona, mis hijas y mi casa. Y puedo dormir en paz y sin perturbaciones.
Sabes que mi hermana siempre tiene morados en las piernas brazos como si alguien la mordió durante la noche pero ella duerme sola……
Voy a comprarle cristales blancos……. Para que los tenga alrededor de la habitación.
Interesante articulo, mi novio a veces de despierta con un arañazo que parece una estrella de tetragramaton, a veces me dice me habra arañado una bruja , es extraño. pero pienso que es por envidia le saldra el es muy buena persona. saludos!!
Excelente artículo Elise! Coincido plenamente en lo planteado, y sólo dentro de lo paranormal es posible comprender este tipo de fenómeno que afecta a la humanidad y que se manifiesta en nuestra vida cotidiana. No obstante, existe un número importante de personas que ignoran esta perspectiva y tratan de buscar en las ciencias materiales la respuestas a algunos eventos de esta naturaleza, en algunas oportunidades hay éxito con abordaje ya sea en asesoramiento o terapias psicológicas, pero en otros casos no se logra ayudar a las personas víctimas de estos parásitos tan nocivos para salud espiritual, psíquica y física de… Leer más »
Muy buen articulo, estoy conforme con toda su información. Gracias