En los últimos años, las tendencias de bienestar personal, como la terapia con sal, han entrado oficialmente en nuestra vida. El uso de cristales como una forma de protección se ha vuelto particularmente popular, apareciendo en todo Instagram, en muchos lugares de las casa e incluso en el trabajo. Para empezar, los cristales son conductos para la energía curativa de la Tierra cuando se usan correctamente. Los cristales emiten vibraciones positivas, edificantes, energizantes y calmantes que te ayudan a lograr una mente más tranquila y un estado físico revitalizado.

Las vibraciones de los cristales surgen de la forma única en que sus átomos y moléculas se mueven e interactúan, y estas vibraciones y energías pueden entonces afectan nuestros cuerpos y mentes humanos. Nuestros cuerpos son organismos dinámicos, electromagnéticos; tenemos energía física, emocional, mental y espiritual fluyendo a través de nosotros constantemente. Los cristales son una forma divertida y única de ayudar a dirigir e influir en esa energía hacia una mayor salud cuando se usan con la intención correcta. Nuestros antepasados ​​han valorado los cristales durante siglos. Los seres humanos han utilizado piedras con fines curativos y energéticos durante miles de años.

¿Qué hacen los cristales curativos?

Los cristales se utilizan para la curación, el trabajo de meditación, almacenamiento de información etérica, protección y canalización. Muchos tienen formas específicas, tales como cráneos de cristal y cuencos de cristal, estos se utilizan para la curación, el equilibrio, el despertar de la conciencia y la adivinación. Los cristales vibran en diferentes frecuencias dependiendo del cristal, su tamaño y su uso. Las personas somos “guiadas” hacia un cristal especifico, determinado por la frecuencia vibratoria de la persona en un momento dado y la del cristal elegido. Tu lo tocas y sabes que es tuyo, sabes que estas en sintonía con ese cristal.

Los puedes colocar en cualquier lugar que ellos ya saben lo que tienen que hacer. Todo el mundo tiene su propio método para la limpieza de los cristales. Hay un método muy fácil, se divide en tres pasos: limpiar, cargar y programar. Para limpiar el cristal debes sujetarlo de bajo del grifo con agua fría unos segundos, aplicar un poco de jabón suave y aclarar de nuevo. Colocarlo sobre un paño suave y dejar secar. Colocar a la luz del sol durante unas horas y luego ponerlos en un lugar de la casa. A veces puedes cambiar la ubicación, siempre estarás guiada por tu intuición o por la vibración de los cristales.

Para este ultimo paso de programación, puedes visualizar un deseo concreto, colocando el cristal o piedra entre tus manos. Así mismo, los cristales vibran a diferentes frecuencias para mejorar la cicatrización porque tienen excelentes propiedades curativas y también tienen la capacidad de transformar un campo de energía desequilibrado. Podemos colocar pequeños cristales de cuarzo en el agua y así ionizarla, esta es una buena idea para la sanación. Siempre es bueno tener algunos cristales de cuarzo alrededor de la casa para equilibrar las energías, incluso si no se necesita para la curación. Cristales y piedras se pueden utilizar por si solo o en combinación con otros cristales.

Trabajando con los cristales

Concha de Abulón: Se compone de carbonato y de calcio, crece en el océano, formando parte de un ecosistema vivo. Varios tipos de cascara se han utilizado como joyas durante siglos. Uno de estos tipos son los constituidos por capas de nácar. Fortalecen la estructura del cuerpo y funciones del chacra del corazón.

Ágata: Es una variedad micro cristalina de sílice de cuarzo. Aceptación, conexión con la tierra, equilibrio emocional, equilibrio físico, fuerza y protección. El ágata es protectora frente a los malos sueños. También protege del estrés y el agotamiento de energía. El ágata se utilizaba en joyerías en la antigua Babilonia. Las ágatas que tienen bandas de colores se colocan de bajo de la almohada y ayuda a dar sueños positivos y variados. Coloca el ágata en el plexo solar. Aunque no puede cambiar las emociones nos ayudara a cambiar nuestro nivel de aceptación de la emoción. Por esto es considerada tan poderosa, porque nos da la fuerza necesaria para seguir adelante. Podemos llevar una ágata cuando tengamos que tomar una decisión importante.

Ángel Aura: Es una variedad de cristal de cuarzo. Piedra espiritual que nos ayuda a contactar con nuestro ángel, y al mismo tiempo eleva nuestra vibración, nos transmite una profunda paz en la meditación, purifica nuestra energía, promueve la alegría, la luz, el optimismo, activa el chacra de la garganta, nos ayuda a encontrar nuestro propósito personal.

Cristales Dévicos: Son cristales maestros. Estos cristales forman en el interior como un arcoíris, son inclusiones de aire atrapado, agua y gas llamado velo y laminas. Proporciona una puerta de entrada para los ángeles, divas y otros seres de luz, atrae a seres de dimensiones superiores de la luz, digamos maestros de un reino superior. Este tipo de cristales permiten que los velos entre los mundos se levanten y las energías espirituales se infiltren en el entorno físico. A veces de un día para otro aparecen en su interior espirales u otras figuras que habrá que tomar en cuenta y saber interpretar bien como signo importante. No te preocupes por su interpretación, tu intuición después de un tiempo con este cristal aumentara tanto que instintivamente lo sabrás.

Debes tener en cuenta

Los cristales maestros no se usan en terapias, este es un tipo de cuarzo personal, solo se utiliza para el crecimiento y la propia evolución. Este es considerado como uno de los doce cristales maestros. Independientemente de cuál elijas, asegúrate de «cargar» tu cristal dejándolo reposar en un una ventana soleada o en el exterior bajo la luz solar directa o la luz de la luna durante al menos cuatro horas. Absorber la luz del sol y de la luna ayuda a que los cristales retengan más energía.

Cuando establezcas tu intención, intenta ser lo más específico posible. Si estás tratando de atraer más energía a tu vida, visualiza cómo te sentirías con ese impulso adicional. Si estás tratando de cultivar más paz, piensa en pensamientos tranquilos. Sin importar tus objetivos, todos los cristales pueden ayudarte en tu viaje hacia un mejor bienestar cuando se usan con intención. Piensa en tu cristal como una piedra de poder, tanto literal como figurativamente, que puede ayudarte a recordar esa intención a medida que avanzas en tu día a día.